¿Cuáles son los efectos de la ingestión de carne y sangre muerta?

Es muy difícil comer carne y sangre vivas, los animales tienden a moverse y luchar para intentar comerlos. Y los humanos no somos buenos para tragar nuestra comida entera.

Lo que sucede cuando comienzas a comer es que el olor, la vista y la masticación de los alimentos comenzarán el proceso de digestión.
Sus glándulas salivales producirán más saliva, por lo que su comida se mezclará con enzimas y se molturará para obtener una pulpa manejable.
Además, el estómago comenzará a producir más ácidos y enzimas de digestión.

Cuando se traga la carne molida y la sangre, se presionará hacia abajo en el estómago mediante contracciones musculares en el esófago.

En el estómago, los receptores notarán que la comida está hecha principalmente de proteínas y, por lo tanto, se mantendrá durante un tiempo en el estómago. El estómago producirá contracciones musculares para mezclar completamente los alimentos con ácidos estomacales y enzimas. De este modo, la carne y la sangre comenzarán a descomponerse en componentes más pequeños.

Los receptores que reconocen las proteínas también enviarán señales al páncreas de que hay una comida rica en proteínas en su camino, por lo que el páncreas aumentará su producción de proteasas (enzimas que digieren proteínas) en el jugo pancreático.

El estómago comenzará a conducir lentamente la carne mezclada con ácido hacia la primera parte del intestino, el duodeno, donde la carne mezclada se mezclará aún más con los jugos pancreáticos y la bilis. El jugo pancreático también contiene una base que neutraliza el ácido del estómago.

En el intestino, la comida se mezcla más con contracciones musculares y se mueve a través del intestino mediante estas contracciones. Ahora las proteínas de la carne y la sangre casi se dividen en aminoácidos y el intestino absorberá los aminoácidos y los ácidos grasos y carbohidratos de la carne.

Las cosas que no pueden ser absorbidas, como tendones y algunas moléculas traza, serán empujadas al colon. En el colon, nuestro probiótico fermentará los últimos nutrientes de la carne y podremos absorber algunas de las vitaminas que produce el probiótico.

Por fin excretamos algunas huellas de la carne y la sangre que no pueden ser digeridas, junto con una gran cantidad de bacterias muertas.