Una dieta baja en sodio y baja en grasa es la clave para los pacientes con HVI. Una dieta saludable con ejercicio regular es la clásica receta médica. Sin embargo, hay algunos consejos que se pueden incluir en la dieta para facilitar el proceso.
1. Manténgase alejado de alimentos procesados y enlatados.
2. Incluya frutas tales como papaya, manzana y plátano consistentemente en la dieta.
3. Incluya hierbas y especias que no incluyen sodio para mantener el sabor de las comidas.
4. Incluya más grasas saturadas ya que tienen un menor conteo de calorías.
5. Debe mantenerse alejado del alcohol y del tabaco antes de traer cualquier otro cambio.
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6. La inclusión específica de vitamina B1 en la dieta también es una solución útil. Eso se puede lograr comiendo vegetales de hoja verde como brócoli, espinacas, frijoles y lentejas en la dieta.
7. La leche es uno de los salvadores en este caso, ya que no tiene contenido de sodio y tiene una serie de cualidades nutritivas.
8. Consulte a un dietista para un plan de dieta personalizado que se puede construir sobre la base de pruebas específicas de la la y los niveles de sodio, azúcar y colesterol.
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