No es útil intentar evaluar cómo los alimentos “saludables” se encuentran en una especie de “escala”.
Seriamente.
Esto se aplica a las investigaciones ordinarias hasta reclamos ridículos sobre “superalimentos”, muy publicitados por personas que se llaman “Oz” y “Mercola”. No existe tal cosa.
Los alimentos pueden ser fuentes disponibles de nutrientes esenciales a un costo razonable, en cuyo caso es posible que desee agregarlos a su ingesta diaria. El eglefino, por ejemplo, es un pez perfectamente adecuado (Melanogrammus) , un miembro de la familia Gadus (bacalao) y una de mis especies favoritas. No existen factores perjudiciales, como el alto contenido de mercurio que está asociado con las especies depredadoras más grandes, o las toxinas de las algas como la ciguatoxina, por lo que está en la lista y es muy sabroso también. Las poblaciones de eglefino han mostrado signos de recuperación en parte, pero siguen siendo potencialmente amenazadas si se obtienen mediante métodos no sostenibles.
Así que, por supuesto, piense en las razones para clasificar los alimentos como “inseguros” , pero si carecen de características “inseguras” obvias, entonces están en la lista “comestibles” , junto con todas las fuentes alternativas de esos nutrientes.
