La respuesta depende del cuidado tomado al congelar las verduras.
Si las verduras se blanquean (cocción a baja temperatura) y se congelan poco después de ser recogidas, y permanecen en un recipiente hermético, perderán muy poco de su valor nutricional.
Sin embargo, si su comida no se congela poco después de ser cosechada, y viaja cientos de millas antes de ser congelada, ¡es posible que pierda la mitad de su valor nutricional cuando llegue al congelador! Además, si no almacena las verduras congeladas en un recipiente hermético, su contenido nutricional disminuirá como resultado de la oxidación.
Dicho todo esto, congelado no es tan malo como el enlatado (cocinado a fuego alto, con sal y conservantes agregados), y fresco es el mejor.
Si es posible, vegetales frescos, locales y de temporada. Si está comprando congelado porque cree que es menos costoso, se sorprenderá al saber que comprar en temporada es a menudo bastante asequible. Si está comprando congelados para cocinar, entonces la pérdida nutricional menor es el compromiso que tiene que hacer.