Cómo encontrar información confiable y científica sobre salud y nutrición

Clasificar hechos de ficción es difícil. Hay tantos estudios contradictorios, tantas personas con una creencia absoluta en su método o disciplina, que requiere un esfuerzo extraordinario para que cualquier persona encuentre la verdad.
Un ejemplo obvio de hace algunos años fue que la dieta propuesta por Atkins y descartada por la comunidad médica como peligrosa, era similar, si no idéntica, a la dieta recomendada para diabéticos. Parece que cada semana aprendemos que el café es bueno / malo para usted, el vino tinto es bueno / malo para usted, los huevos son buenos / malos para usted.
Mis fuentes para obtener información son el sitio web NIH para información médica y la FDA para información nutricional. La razón es que tienden a ser muy conservadores con respecto a su información. No es que no haya algunos whackaloons en ambas instituciones, pero en general los considero un buen punto de partida.
OTOH, todos nosotros estamos buscando esa poción mágica que nos transforme en la forma que queremos ser. Queremos persuadirnos de que alguna baya o aceite oscuro nos arreglará de la noche a la mañana. Agregue a eso el reciente descubrimiento de que algunos fabricantes de suplementos han estado vendiendo, en el mejor de los casos, placebos, en el peor de los alérgenos y venenos, y es difícil saber a dónde acudir.
Me temo que debes hacer el trabajo pesado tú mismo. Mire los valores nutricionales, cree una dieta y un programa de ejercicio que sea viable, no espere que todo cambie para mañana, excepto su actitud, y no confíe en sustancias milagrosas “no puede fallar”, especialmente aquellas que supuestamente curan múltiples y diversas enfermedades.
Creo que un enfoque bueno y lógico de la nutrición es el de Michael Pollan: “Coma alimentos reales, en su mayoría plantas, no demasiado”.
¡Buena suerte!