Un velocista necesita tener un cuerpo delgado ágil con poca grasa corporal y más músculos magros. Además, el sprint es un tipo de actividad HIIT, por lo que agota por completo el nivel de glucógeno después de una sesión intensa.
Se recomienda que un velocista tenga de 6 a 8 gramos de carbohidratos por kg de peso corporal, de 1.2 a 1.8 gramos de proteína por kg de peso corporal y de 25 a 30% de las calorías diarias de las grasas saludables. La mayoría de las fuentes de carbohidratos deben ser complejas, como el arroz integral, los cereales integrales, las verduras, etc. para que sigan suministrándole nutrientes durante todo el día para su recuperación. Puede tener carbohidratos simples inmediatamente después de entrenar junto con la cantidad adecuada de proteínas para restaurar sus niveles de glucógeno.
En cuanto a las grasas saludables, fuentes como aguacate, nueces, aceite de oliva, semillas de lino, pescado son las mejores.
