La atención plena puede ser la respuesta para vivir un estilo de vida más saludable y tranquilo, por lo que es tan importante señalar qué puede estar causando que lo sabotees.
Aquí hay hábitos que pueden sabotear la atención plena y cómo contrarrestarlos.
Los malos hábitos que conducen a la falta de atención plena:
- No estar en el presente y no darse cuenta de cómo te sientes en este momento. En lugar de planificar su próxima comida, preocuparse por el trabajo o estresarse por la vida.
- Comer mientras te distraes con la tecnología y la televisión.
- Creencias limitadas Te nublan los pensamientos y te limitan de seguir adelante. Reducen su atención plena a medida que el enfoque se desplaza desde cómo se siente y qué está haciendo en este momento.
- Sobre comer y beber demasiado. El alcohol limita las inhibiciones y sabotea por completo la atención plena. El consumo excesivo generalmente se debe a una naturaleza adictiva o demasiada azúcar: intente darse cuenta cuando lo haga.
- No escuchar. Cuando estás en tus propios pensamientos y no prestas atención a lo que está frente a ti, entonces no estás siendo consciente y le das a la otra persona la atención que merecen.
Para detener lo anterior y vivir una vida más saludable:
- Comienza a pensar en la comida y las comidas como una experiencia. Siempre tenga en cuenta y concéntrese en lo que está haciendo, en cómo cada ingrediente lo beneficiará.
- Deje de comer cuando esté lleno, es difícil pero hay una táctica para hacerlo. [1]
- Ejercita el control de la porción y sirve en platos más pequeños.
- Cuando esté entrenando, considere si es un castigo o si ayuda a crear un cuerpo y una mente más fuertes. La atención plena te ayudará a darte cuenta de cuándo eres cruel con tu cuerpo.
- Respire por 5 minutos cada día. Observe los pensamientos pero déjelos flotar lejos.
- Practica yoga todos los días, incluso si solo son 10 minutos. Energiza tu cuerpo, te conecta con tus sentidos y te prepara para el día.
Notas a pie de página
[1] ¿Qué te pones al gimnasio? | Desafío de 100 días | Blog de Everdine