Las hamburguesas y la pizza no son intrínsecamente malas. Ambos contienen los macronutrientes que deberían estar presentes en cada comida: carbohidratos, proteínas y grasas.
Desafortunadamente, el pan contiene muchos carbohidratos simples. El cuerpo los descompone fácilmente en azúcares. En exceso, el cuerpo convierte los azúcares en grasa para el almacenamiento a largo plazo.
El cuerpo funciona mejor cuando las proporciones de macronutrientes se equilibran en función de su estilo de vida (activo versus sedentario). Debido a que hay muchos estilos de vida diferentes, y debido a que las hamburguesas y la pizza se pueden preparar utilizando tantos métodos / ingredientes, las proporciones entre los macronutrientes a menudo son sesgadas, por lo que a veces es difícil saber qué tan nutritiva puede ser una hamburguesa o pizza en particular.
Como regla general, siempre coma despacio y pare cuando se sienta lleno. Después de todo, el punto de comer una deliciosa hamburguesa o pizza es disfrutarlo … ¡no sentirse miserable después! Sentirse satisfecho es que su cuerpo indique que ha recibido una cantidad adecuada de nutrientes. El cuerpo almacenará menos grasa y es poco probable que aumente de peso.
