¿No puede comer lo suficiente como para sentirse mal?

Sí. Su cuerpo requiere una cantidad fija de calorías para las actividades diarias. Un menor consumo de alimentos reduce el conteo mínimo de calorías. Debido a lo mismo, sentimos pereza todo el día. Menos energía reduce el poder de inmunidad del cuerpo, por lo que nos enfermamos fácilmente y con frecuencia. También prolonga el proceso de recuperación.