El índice de masa corporal es ampliamente utilizado para evaluar si un individuo tiene sobrepeso / obesidad, bajo peso o es normal. La intención con tal escala es determinar los riesgos del individuo para la morbilidad.
Existen situaciones en las que el diagnóstico, la elección de la modalidad de tratamiento y los medicamentos, y las decisiones de detección se basan en el IMC de una persona. Es un cálculo simple que permite discernir a las personas obesas / con sobrepeso que tienen riesgos obvios para la salud, especialmente con respecto a las enfermedades cardiovasculares, de las personas con menos riesgo. Esta discriminación se puede hacer fácilmente con un simple cálculo. A efectos prácticos, sí, el IMC es útil.
El IMC puede no ser la representación más precisa de la cantidad de grasa corporal y distribución de grasa. Para propósitos de investigación estricta, las correlaciones con el IMC pueden ser menos precisas, ya que existen otros métodos que se han recomendado como superiores. Estos métodos, sin embargo, son más costosos y consumen más tiempo.
Los puntos de corte para la clasificación de IMC se deducen de los experimentos que han rastreado a decenas de miles de personas para conocer su esperanza de vida y las causas de muerte. Como con la mayoría de los experimentos, hay estadísticas involucradas. Para aquellos que caen entre dos puntos de corte, la mayoría tendrá destinos similares, no todos. Aún así, es una buena regla general bajar el IMC para una vida más saludable.
