Limite la cantidad de sal que agrega al cocinar. En su lugar, almacene su armario de especias con condimentos y especias sin sal. Busque recetas que no requieran sal agregada. Las hierbas frescas, los jugos cítricos, los vinagres y el ajo son formas bajas en sodio para agregar sabor a sus alimentos. Aquí hay unos ejemplos:
- Exprima el jugo de limón fresco sobre vegetales al vapor, pescado asado, arroz o pasta. Es posible que desee probar exprimir zumo de lima fresca en platos españoles.
- Pruebe con pimienta de limón sin sal o sodio o condimentos de mezquite en el pollo.
- Agregue la cebolla cocida y el ajo para animar las carnes y las verduras.
- Agregue hierbas frescas a ensaladas, pasta o platos de arroz para mejorar el sabor en lugar de agregar sal o condimentos con alto contenido de sodio.
- Marinar las verduras o cocinarlas con vinagre balsámico.