La mejor combinación sería la natación aeróbica y el yoga.
Sin embargo, cualquier combinación de un deporte aeróbico (correr, andar en bicicleta, nadar, remar, …) con un programa de fuerza y flexibilidad (yoga, pilates, levantamiento de pesas, estiramientos) debería producir un equilibrio de fuerza, cardio y resistencia.