La conciencia es clave. La postura es habitual. Contraer y extender los músculos de manera simple cuando nos movemos, nos paramos, etc. envía señales a la fascia (un tipo de tejido conjuntivo) y la señal causa cambios en el estado de la fascia. Una postura pobre o distorsionada se vuelve fija debido a que estas señales se envían a la fascia de forma regular y frecuente, lo que hace que estabilice esta postura haciéndose más fibrosa. Así que, aunque no sea la postura ideal para su cuerpo, la fascia lo arregla de manera efectiva, ya que esto significa que los nervios y los músculos no tienen que seguir siendo disparados para estabilizarlo en esta postura que adopta habitualmente. Entonces, debe cambiar sus hábitos diarios e incluso horarios de cómo se mueve, se sienta y se para. Entonces, cómo levantas pesas y otras rutinas de ejercicio pueden estar contribuyendo a tu postura.
El libro de Mary Bond “las nuevas reglas de la postura” es una guía excelente para mejorar su postura. Es práctico y los ejercicios realmente te ayudan a crear conciencia. Su sitio web también es muy útil. Es Mary Bond • Postura, Percepción, Presencia.
