Una pregunta filosófica. A nivel psicológico, Christopher Bollas (Psicoanalista estadounidense que vive en Londres) sugiere que hay un proceso inconsciente (como en el inconsciente de Freud) que está operando todo el tiempo, vinculando “objetos” mentales, en cadenas de asociación en cascada, usando reglas distintivas de semejanza. (Espero estar representando sus ideas correctamente). Al llamarlos “objetos mentales”, deliberadamente soy inespecífico en cuanto a lo que son, porque el Inconsciente funciona de manera diferente a nuestra mente consciente, por lo que llamar a estos elementos “ideas” o “datos” o cualquier cosa con un nombre familiar sería distorsionar lo que son Sin embargo, sería justo decir que contienen la información que recibimos y hemos almacenado, de alguna forma adecuada para que el Inconsciente trabaje con ella.
El procesamiento Inconsciente que crea estas cadenas también las vincula extrañamente, en lo que concierne al “pensamiento” consciente; se asemeja más a cómo vinculamos las cosas por similitud en lugar de significado, como en varias formas de ‘juego de palabras’; entonces ‘ojo’ podría estar vinculado a ‘I’ y a alguien llamado ‘Iris’, y luego a ‘Murdoch’, y así sucesivamente. Aunque esto suena como una forma de “aleatorización” para comportarse, creo que sería engañoso creer eso, porque las cadenas de asociación “trabajan” sobre áreas que son de interés emocional, es decir, están “perturbando” la psique en el sentido mas amplio.
En este modelo de procesamiento inconsciente uno puede ver cómo las ‘proto-ideas’ pueden generarse a partir de asociaciones, de maneras que son la base misma de la creatividad. Nada nuevo viene de la nada (a menos que tengamos ciertos puntos de vista con respecto al “Big Bang”), pero se pueden seleccionar nuevas cosas y nuevos pensamientos de un vasto conjunto de nuevas asociaciones, que tienen algún ‘significado’ adjunto, si solo en humanos condiciones.
Entonces, los “pensamientos” en el sentido consciente pueden tener una historia en el Inconsciente antes de que los “pensemos”. En cuanto a “donde están”, tal vez el mismo lugar que el número 42.
