Personalmente, prefiero los entrenamientos matutinos porque encuentro que puedo mantener un alto nivel de energía durante todo el día después de un entrenamiento de buenos días. Además, los estudios han demostrado que una persona quema más calorías diarias totales cuando hace ejercicio por la mañana y no por la noche.
Dicho esto, cada persona es diferente y tiene diferentes ritmos circadianos y patrones de sueño.
Hay un gran libro recientemente publicado llamado “El poder de cuándo”, que analiza tu cronotipo y te dice en qué momentos tu cuerpo responde mejor para hacer ejercicio, dormir, comer e incluso para tener relaciones sexuales. Echale un vistazo.