El mundo produce significativamente más alimentos de los que se requieren para mantener a la población actual, el problema radica en la ética, la economía, la política y la logística de la distribución equitativa. Para resolver el problema del hambre, se deberán responder varias preguntas clave en cada categoría.
Ética:
- ¿Es el hambre algo inherentemente malo?
- ¿Los individuos del mundo tienen alguna responsabilidad moral para resolver el problema?
- ¿Es la redistribución de alimentos por fuerza gubernamental o coacción ética?
Ciencias económicas:
- ¿Cuál es el alcance de la desigualdad alimentaria?
- ¿Cuáles son los beneficios del sistema actual?
- ¿Cuánto costaría cambiar las cosas?
- ¿Cómo afectarían los cambios a otros sistemas económicos?
Política:
- ¿Quién va a convencer a la gente para que apoye los nuevos cambios?
- ¿Quién tiene la autoridad para hacer los cambios propuestos?
- ¿Es el sistema lo suficientemente popular como para retener el soporte después de ser implementado?
Logística:
- ¿De qué manera se redistribuirá la comida?
- ¿Cómo se medirá la igualdad de distribución de alimentos?
- ¿Se cultivará la comida y luego se moverá, o se moverán los medios de producción de alimentos?