La hipoglucemia, a menudo llamada “nivel bajo de azúcar en la sangre”, puede ser causada por problemas hormonales, pero también puede ser causada o exagerada por una dieta excesivamente estricta. Una dieta no debe ser tan extrema como para provocar desequilibrios químicos o trastornos de la alimentación.
Cuando una dieta proporciona calorías y carbohidratos “suficientes” y la persona todavía experimenta síntomas de hipoglucemia, una respuesta que a veces es útil es cambiar la ingesta de carbohidratos a carbohidratos más complejos. Los carbohidratos complejos tardan más en digerir, ingresan al torrente sanguíneo de forma más gradual y pueden provocar una reacción de insulina más leve, de modo que el nivel de azúcar en la sangre permanece algo más alto. Otra respuesta, cuando la persona experimenta los bajos niveles de azúcar en la sangre, es comer una pequeña cantidad de carne o productos lácteos. Estos son alimentos ricos en calorías y funcionarán para contrarrestar los efectos de la reacción de la insulina.
Si la dieta es razonablemente delicada, y los niveles de azúcar en la sangre de la persona se ven muy afectados, la persona debe someterse a un análisis endocrinológico de su química sanguínea y consultar a un nutricionista competente para ajustar la dieta.