¿Por qué producimos alimentos GM a pesar de que es dañino?

Los alimentos genéticamente modificados no son categóricamente dañinos ni seguros. Además, la modificación genética tiene poco que ver con su seguridad. Decir que los alimentos genéticamente modificados son dañinos es incorrecto; no hay ninguna base para esa declaración. En el mejor de los casos, se podría decir que la seguridad de la exposición crónica a un producto genético particular durante muchas décadas es desconocida, y eso tiene más validez, aunque los humanos literalmente consumimos millones de estos compuestos en cada comida, por lo que el riesgo general se considera bastante pequeña. Además, la mayoría de los productos genéticos que se encuentran en los alimentos comerciales con OGM no son nuevos en la dieta humana, solo son nuevos en la planta específica.

Producimos alimentos GM porque hay una demanda para eso. Hay algunos cultivos que tienen genes de resistencia viral o fúngica añadidos y son la única razón por la que la cosecha todavía existe en la actualidad (las papayas son un buen ejemplo). Existen cultivos que contienen proteínas de las bacterias del suelo que son dañinas para los insectos con tractos digestivos alcalinos (los llamados cultivos “Bt”; la misma proteína es el principal pesticida utilizado en la agricultura orgánica, pero a una concentración mucho mayor). Algunos cultivos contienen una versión modificada de la enzima EPSPS (una enzima involucrada en la síntesis de ciertos aminoácidos) de bacterias del suelo cuyo sitio activo se une al glifosato y por lo tanto es resistente a la exposición al glifosato (las llamadas “semillas Round-up Ready”) . Hay arroz que incluye una enzima, fitoeno desaturasa, de bacterias que hacen que el arroz produzca beta caroteno y vitamina A en el arroz (el llamado “arroz dorado”).

Todos esos productos comerciales están compuestos por productos genéticos que ya eran básicos de la dieta humana de otras fuentes durante milenios, a excepción del gen de Bt, aunque los humanos han estado usando Bt y comiéndolo en sus frutas y verduras durante aproximadamente 150 años en este punto.

Hay una demanda porque los cultivos tienen un menor riesgo de crecimiento y tienen rendimientos más consistentes que sus variedades no transgénicas. Esto minimiza el costo y el riesgo para los agricultores.

Podría decirse que el cultivo OMG comercial más peligroso son las plantas resistentes al glifosato, no porque la planta sea nociva, sino porque existe la preocupación de que fomenten la liberación descuidada y excesiva de glifosato en el medio ambiente (que se descompone muy rápido, pero no obstante es bastante tóxica plantas no resistentes).