Mientras que los chinos y los nigerianos disfrutan de glutamato monosódico en los alimentos, los indios y los occidentales tienen miedo al glutamato monosódico. ¿Que esta pasando?

En los Estados Unidos, en 1968, un tipo llamado Robert Ho Man Kwok escribió una carta al editor del New England Journal of Medicine que decía que le dolían la cabeza después de comer en su restaurante chino local y especuló que podría ser causada por el MSG. En ese momento, los EE. UU. Estaban en medio de un nuevo interés en “alimentos saludables” y una moda dietética que persiste en la actualidad de creer en “súper alimentos” y “alimentos tóxicos” de varios tipos. Luego, la carta hizo las rondas en boletines de alimentos naturales y lentamente apareció en la prensa popular como “Síndrome del restaurante chino” con nuevos síntomas que aparecen todo el tiempo. Los restaurantes chinos abandonaron el ingrediente casi de la noche a la mañana por temor a que impactara en los negocios y pusieran “No MSG” en sus menús, lo que solidificó en las mentes de las personas el peligro de ello. A lo largo de los años, se han realizado diversos estudios sobre el consumo de glutamato monosódico, y ninguno ha encontrado ninguna evidencia de ninguno de los supuestos efectos, en gran parte por los que todavía se utiliza en los alimentos. Hasta el día de hoy, muchos estadounidenses aún recuerdan el miedo a los MSG de los años 70 y lo evitan fuera de curso. Otras personas temen el nombre porque suena artificial (es un aminoácido hecho de proteína vegetal hidrolizada).