En Marruecos y en gran parte del mundo árabe, las personas asumen que es solo por razones médicas, como la diabetes, y sienten lástima o insisten en que “hagan una excepción”. Los productos de origen animal todavía son reverenciados como algo bueno, aunque la mayoría de la gente conoce las consecuencias de salud que existe en la vieja idea de que es un alimento muy apreciado. Lo servirán para recibir a las personas como invitados especiales en grandes cantidades, etc.
Está tan arraigado en la tradición, y creen que también está ligado a la religión, que tienen grandes dificultades para entender incluso el concepto de que alguien no come productos animales para reducir el sufrimiento.
