¿Cómo te sientes cuando pospones? ¿Después?

Depende si la procrastinación tuvo un resultado tangible, como olvidar reservar viajes para una conferencia y no llegar al final porque los boletos de avión se volvieron demasiado caros.

Cuando consigues engañarte y proponer excusas para posponer las cosas, te olvidas de que, al final, eres tú el único engañado, nadie más.

Cuando llega este pensamiento, la procrastinación realmente atormenta.