Para algunos, lo hace y depende de lo que quiere decir con “ayuda”.
Para mí (como un adulto diagnosticado a los 34 años, ahora 48), el café me calma y aclara mis pensamientos.
Al ser un estimulante, tiene el efecto opuesto en un cerebro con TDAH que alguien sin nuestra química cerebral única, así que si con “ayuda” te refieres a que se calma y proporciona claridad, entonces sí.
Si estoy agitado, estresado o no puedo dormir, un café me tranquiliza o me ayuda a dormir, así que soy un ávido bebedor de café además de los medicamentos que tomo.