¿Qué tan insalubre es el estrés, la ansiedad, el miedo, la tristeza, etc. para el cuerpo?

Recuerde los momentos en que estuvo estresado, triste, asustado o ansioso. ¿No te sentiste físicamente cansado y enfermo también? La salud emocional está directamente relacionada con la salud física. El mal estado mental puede afectar sus otras funciones corporales. Tu cuerpo no merece tal negligencia. Antes de que eso suceda, controle sus sentimientos antes de que se convierta en depresión. La mejor manera es expresar y dar a tu mente un poco de paz. Si es un amor no dicho, confiesa. Si estás triste, tómate un tiempo “ME”, trata de dedicar tiempo a tu pasatiempo favorito y comparte tu corazón con las personas que amas y en quienes confías. Si estás enojado, saca esa agresión de algo beneficioso. Jog por 2 kms. un día con todas sus fuerzas, dedíquese a su carrera o meta vital. Si estás ansioso, alégrate al meditar, caminar en la naturaleza, abrazar a la persona que amas (mamá, papá, esposa o cualquier persona que ames).

En última instancia, uno necesita encontrar formas de lidiar con los sentimientos anteriores. ¿Quién dijo que la vida es fácil? 😉 Tenemos corazones y eligen cambiar de humor con más frecuencia de lo que nos cambiamos de ropa. 😛 Así que mantengamos listos nuestros mecanismos de defensa. Después de todo, debemos ser felices al final del día.