La mejor manera de hacerlo es usar una base de datos. Escriba el alimento específico que está comiendo (también debe especificar si está crudo o cocinado), y el peso (los gramos son la medida más precisa, use una báscula de cocina si desea el contenido nutricional exacto).
Estas son algunas de las bases de datos que puede usar:
- Valor nutricional
- Calculadora de receta SparkPeople
- MyFitnessPal
Si la base de datos solo tiene los alimentos crudos o no mides los alimentos, tus cálculos estarán desactivados. Mientras que algunos alimentos tienen más nutrientes crudos, ciertas vitaminas en realidad se vuelven más biodisponibles cuando se cocinan. Por ejemplo, la vitamina A en espinacas y zanahorias se absorberá mejor si las verduras están cocidas.
También puede usar métodos de cocción más suaves y no despojar a los vegetales de sus nutrientes. Por ejemplo, si hierve las verduras y luego vierte el agua, perderá las vitaminas solubles en agua. En su lugar, saltee, ligeramente a vapor, cocine a presión rápidamente o tueste sus verduras.