No hay duda de que lo que comemos puede influir en nuestros cerebros. La dieta cetogénica se usó para niños con epilepsia. Este estudio indica que una dieta alta en carbohidratos y baja en grasa puede ser un factor en la demencia. Este es un resumen de los efectos neuroprotectores de la dieta cetogénica. Este estudio muestra que las cetonas ayudan con el deterioro cognitivo.
Por lo tanto, algunos estudios sugieren ayuda con cosas como el deterioro cognitivo. Me imagino que mucho dependerá de la fuente de la demencia. No estoy seguro de que una dieta cetogénica pueda ayudar con cosas como la demencia vascular.
