¿Por qué nos sentimos tan incómodos por la mañana cuando nos despertamos?

Este fenómeno se llama “inercia del sueño”. La sensación subjetiva de “despertarse por la mañana” es muy idiosincrásica. Algunas personas se sienten bien, otras en el medio, y algunas tienen experiencia como la suya. Sin embargo, es casi universalmente experimentado si se despierta en el medio de la noche, particularmente si se despierta durante la primera o las dos horas del ciclo de sueño nocturno.

La “inercia del sueño” se define como un estado fisiológico caracterizado por una disminución en la destreza motriz y una sensación subjetiva de somnolencia inmediatamente después de un despertar abrupto. Para la mañana, la gravedad de este fenómeno se puede reducir asegurándose de levantarse a la misma hora todas las mañanas, los siete días de la semana, los 365 días del año.

La investigación más reciente sobre este fenómeno es altamente sugestiva de que si esto persiste para las personas a lo largo de sus vidas, se debe en gran parte a una predisposición genética hacia la preferencia nocturna más comúnmente conocida como un ave nocturna. La preferencia por la noche representa la variabilidad genética normal en el ciclo del ritmo circadiano individual de 24 horas, en el que aquellos con este marcador genético tienen un ciclo rítmico de más de 24 horas. Más comúnmente descrito, es análogo a estar en un estado leve de “jet-lag” perpetuo.