Consulte con su médico para ver si hay alguna causa física. A esa edad también empecé a tener dificultades para dormir, lo que supuse eran cambios hormonales, estrés en la escuela y problemas familiares. No es raro que los adolescentes tengan cambios como este.
Investigue la higiene del sueño y encuentre lo que funciona para usted. Una vez que haya establecido que no hay nada físicamente incorrecto, intente no preocuparse demasiado por ello.
Cuanto más lo persigues, más rápido corre.