Ácido y más
Las bebidas gaseosas son efervescencia debido a la carbonatación. Esto es en esencia un ácido (ácido carbónico) y no tiene beneficio para el cuerpo.
Los alimentos muy ácidos hacen que el cuerpo trabaje horas extras para neutralizar el ácido. El calcio es un buen tampón ácido, pero el cuerpo extraerá calcio de los huesos y debilitará potencialmente el sistema esquelético.
A los dientes no les gusta el ambiente ácido tampoco. El ácido acelera la caries dental y es responsable de innumerables cavidades. La sabiduría común sería que cepillarse inmediatamente después de beber una bebida gaseosa o refresco ayudaría, ¿verdad? Los datos muestran que esto realmente aumenta el efecto ácido y acelera el daño a los dientes.
Por último, la mayoría de estas bebidas gaseosas son altas en azúcar o jarabe de maíz alto en fructosa. Esto causa inflamación en el cuerpo, aumenta la insulina, altera la percepción del gusto y le dice al cuerpo que almacene la grasa.
Sáltate los refrescos y las bebidas gaseosas. Pruebe con agua o agua infundida con limón o menta como una opción.