Sí, deberían ser prohibidos.
Los alimentos grasos, bocadillos azucarados, carbohidratos simples, etc. a menudo son responsables de letargo, falta de atención y otras conductas deficientes de aprendizaje que los estudiantes experimentan en la escuela. Desafortunadamente, debido a la descuidada paternidad que tenemos en estos días, las escuelas se ven obligadas a enseñar a los niños habilidades para la vida que ya deberían estar aprendiendo en casa, una nutrición adecuada es uno de ellos. ¿Por qué debería una escuela sancionar el mal comportamiento de todos modos? Si los niños quieren rellenar sus caras con comida basura, tienen el resto del día para hacerlo después de que termine la escuela, pero mientras estén en la escuela, necesitamos que estén al 100 por ciento y enfocados en su educación opuesto a simplemente tratar a la escuela como un lugar para pasar el rato y hacer lo que sea.
