Comencé a comer huevos desde muy muy joven. Huevos me ha traído muchos recuerdos. Aún recuerdo que mi madre me pidió comer un huevo todos los días. Pero a veces realmente no lo quiero, y luego lo arrojé. Mi madre sabe, ella me ganó. (gracioso)
Así que creo que los huevos no deberían tener mala reputación, el mal hombre de negocios se lo merece.