¿Hay alguna forma de dejar de marearse mientras juegas al bádminton?

Juego bádminton todos los días y sufrí este problema durante los primeros días cuando comencé a jugar. El problema al que se enfrenta es demasiado movimiento de cabeza. Esto hace que el canal auditivo interno cambie constantemente el equilibrio de su cuerpo cuando en realidad no se está moviendo en esa dirección. Eso causa desorientación que comúnmente sentimos como mareo. Hay muchas formas de superar este pequeño problema. Pero ten cuidado. Los hechizos constantes de mareos pueden ser dañinos a largo plazo. Esto es lo que debes hacer.

1) Cuando gires la cabeza en una dirección, asegúrate de que la parte superior de tu cuerpo también siga en la misma dirección. De esta forma, el canal auditivo interno no tiene que hacer un ajuste tan drástico.

2) Sé ligero en tus pies. Esto requiere mucha práctica y algunas personas no tienen flexibilidad corporal para esto, pero se puede lograr a través de la práctica diaria. Cuando tus pies son ligeros, tu cuerpo se vuelve más flexible y, por lo tanto, responde automáticamente a la dirección en la que gira la cabeza.

3) Pausa por unos segundos entre puntos. Esto es realmente importante Si no hace una pausa después de un rally prolongado, su cuerpo no tiene suficiente tiempo para recuperarse de los constantes ajustes que ha estado realizando. El encendido continuo dañará los músculos de su cuerpo, lo que también provocará mareos debido a la falta de flujo sanguíneo.

4) Estar lo más hidratado posible. El agua es buena para el cuerpo y la hidratación constante asegurará que no estés en peligro de perder electrolitos a través de la sudoración.

5) Escucha a tu cuerpo. Su cuerpo constantemente da señales para decirle cuándo retroceder. Durante largos mítines, si sientes que tu cuerpo se está desacelerando, eso significa que debes reducir la velocidad. El primer signo sería jadear, seguido de una ligera molestia en las rodillas que luego progresa a la región del muslo. Esto significa que debes tomar un descanso.

Por último, pero no menos importante, recuerda que ningún juego es más grande que tu salud. Juega bien dentro de tus posibilidades y mientras empujas tu cuerpo desde la perspectiva de la aptitud, debes saber dónde trazar la línea. Sigue estos pasos. Estoy seguro de que los mareos se desvanecerán. De lo contrario, consulte a un médico para obtener un diagnóstico más completo.