¿Crees que es posible curar cualquier enfermedad o enfermedad con solo el poder de tu mente?

Sí. El Proyecto del Genoma Humano que dio origen al campo de la epigenética ha transformado la manera en que entendemos la biología y la medicina. La ciencia ahora nos ha mostrado que el cuerpo humano no es solo una máquina biológica sino más bien una fuerza de energía vibratoria, gobernada por la física cuántica, de ahí el éxito del efecto placebo.

Como resultado, la ciencia médica occidental finalmente está reconociendo la medicina energética, la meditación y la oración, e incluso algunos hospitales recomiendan la mediación diaria o la oración e incluso permiten que los practicantes de Reiki o Acupunturistas trabajen con pacientes en el hospital con fines curativos.

Y aunque ha habido una plétora de estudios e informes que son consistentes al sugerir los posibles beneficios medibles de salud asociados con la meditación, la oración o las intervenciones espirituales. El Proyecto de Remisión espontáneo organizado por el Instituto de Ciencias Noéticas es el mayor apoyo científico de estos. tipos de acciones de curación. Ha indexado los hallazgos científicos médicos mundiales sobre el tema de la remisión espontánea que ha resultado en el depósito más extenso de casos reportados médicamente de remisión espontánea en el mundo, con más de 800 revistas en 20 idiomas diferentes.

Hasta la fecha, han recopilado más de 3.500 estudios de casos publicados en la literatura médica sobre personas que han sufrido remisiones espontáneas de enfermedades aparentemente “incurables”. La mayoría de los estudios de casos se centraron en personas con cánceres en estadio 4 que declinaron el tratamiento convencional o recibieron tratamiento. por los doctores convencionales para ser inadecuado para curar. Pero el Proyecto de remisión espontánea también incluye estudios de casos de personas que tuvieron remisiones por insuficiencia cardíaca, enfermedades autoinmunes, VIH e incluso una herida de bala en la cabeza.

El Proyecto del Genoma Humano nos ha mostrado que los genes pueden repararse por acción positiva y nos dice que estas personas pudieron curarse liberando emociones reprimidas, aumentando los sentimientos positivos a través de la meditación o la oración, siguiendo su intuición, acogiendo el apoyo social, profundizando su espiritualidad o la conexión de la energía de la conciencia, tomar medidas en su vida para corregir problemas que nunca antes han enfrentado, y si corresponde, corregir su trauma que puedan haber experimentado en su vida en el momento en que desarrollaron la enfermedad.