Por supuesto. Comer pequeños bocados y comer lentamente ha demostrado ser una excelente manera de mejorar la digestión y ayudar a mantener el peso. Masticar los alimentos lentamente aumenta el nivel de enzimas que mejora la digestión.
En mi opinión, comer lentamente y en pequeños bocados reduce el estrés y le permite beneficiarse de los aspectos de socialización de compartir alimentos con amigos y familiares.