Si los órganos vitales de los seres humanos fueran reemplazados por prótesis o biónica, ¿podrían vivir más de 100 años?

Si los órganos vitales de los seres humanos fueran reemplazados por prótesis o biónica, ¿podrían vivir más de 100 años?

Reemplazar los sistemas biológicos con prótesis u órganos artificiales es lo que comúnmente se llama “una solución alternativa”. Estas soluciones alternativas a veces pueden superar al equipo original, pero no pueden extender la esperanza de vida máxima de los seres humanos más allá de los límites impuestos por la “senescencia del organismo”. Es decir, las dos causas principales de muerte en los Estados Unidos son las enfermedades cardíacas y el cáncer. Si tuviéramos que encontrar un corazón artificial que durara 10.000 años, el cáncer se convertiría en la principal causa de muerte, ya que la edad avanzada es el mayor factor de riesgo de cáncer. En ese punto, la pregunta sería: ¿Cuándo decimos “juego terminado” y apagamos un corazón artificial?

Prácticamente nadie muere de “vejez”. Por el contrario, la senescencia celular hace que las personas sean más susceptibles a cosas como traumas, cáncer, infecciones, fallas de órganos y muerte. Una persona joven también puede morir de traumas, cáncer, infecciones y fallas orgánicas, pero no ocurre tan a menudo con personas más jóvenes porque sus células viejas y dañadas son usualmente reemplazadas por células sanas nuevas a través de la mitosis celular. Como tal, a menos que el proceso subyacente de senescencia se pueda revertir, las personas mayores seguirán muriendo de algo que no los hubiera matado cuando eran más jóvenes.

El principal problema con los reemplazos, genéticos, órganos vitales, prótesis o de otro tipo, es que el hombre que forma parte no comienza a funcionar con la complejidad que el hombre natural tiene. Necesita trabajar con los sistemas nervioso, circulatorio, hormonal / de señalización, linfático, enzimático y otros. No puede ser simplemente una parte plástica o un gen desplazado.

Bueno, no con la tecnología de hoy. La tecnología actual sería extremadamente dolorosa y el paciente posiblemente tenga una vida más corta. Sin mencionar los costosos mantenimientos, reemplazos y reparaciones.

¿Pero quien sabe lo que nos depara el futuro?