¿Las personas que optan por el gobierno manejan planes de salud seguros perdiendo cobertura? Si alguien fuera a obtener un plan y por alguna razón todo fuera derogado, ¿estaría esa persona sin cobertura?

La Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio no es algo que deroguemos. Tenemos una rica historia de derogación, pero solo en casos donde la legislación es anticuada y en gran medida simbólica. El proceso de derogación es realmente solo una formalidad como una especie de ritual de “fin de la vida”. Puede ver una lista de leyes que hemos derogado aquí:

Categoría: legislación derogada de los Estados Unidos

El ACA no es un objetivo final, sino un primer paso para salir de nuestra vida salvaje en el cuidado de la salud. Habrá absolutamente más legislación (cambios, adiciones, eliminaciones) para la ACA a medida que evolucione, pero es muy poco probable que sobreviva a un proceso de derogación total, independientemente de los resultados de las elecciones a corto plazo.

Independientemente de la derogación, la cobertura del seguro de salud es un contrato legalmente vinculante entre un individuo y un asegurador de seguros comercial (no el Gobierno).

Como individuo (no recibiendo cobertura de salud a través de un empleador), cuando compra cobertura, es por un período de tiempo, como se especifica en los términos y condiciones del “plan” que compra (bronce, plata, oro o platino). Ese acuerdo legalmente vinculante es con una entidad comercial, no con el gobierno.

El único papel del Gobierno en este caso es proporcionar el “mercado” (Mercado de Seguros de Salud, Ley de Cuidado de Salud Asequible) donde puede comprar cobertura comercial.

Habiendo dicho eso, como un acuerdo legalmente vinculante con una entidad comercial, usted está obligado por los términos y condiciones de ese acuerdo, y los suscriptores comerciales a menudo cambian esos acuerdos (con el aviso requerido). Los aseguradores comerciales están, sin embargo, fuertemente regulados por los Comisionados de Seguros en cada estado, y luego también por el gobierno federal.

Todo lo cual quiere decir que nadie corre el riesgo de perder su cobertura de seguro en el caso extremadamente improbable de que la ACA sea “derogada”. El proceso de derogación solo (si comenzaba mañana) llevaría años superar todos los obstáculos legislativos, legales y electorales.