¿Qué es la anemia aplástica?

La anemia aplástica es una condición rara (5-10 casos por millón), grave en la que la médula ósea no produce glóbulos blancos, glóbulos rojos y plaquetas. La anemia aplástica se observa tanto en niños como en adultos.

El término Aplastic proviene de la palabra aplasia que significa falla de generación o formación. Anemia significa deficiencia en el componente de la sangre que transporta oxígeno.

El material esponjoso dentro de los huesos se llama médula ósea y es como una fábrica que produce células sanguíneas (glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas). En caso de anemia aplástica, la médula ósea no puede formar o desarrollar células sanguíneas.

Los glóbulos rojos en la sangre transportan el oxígeno de los pulmones a todas las áreas del cuerpo. En la anemia aplástica con menos cantidad de glóbulos rojos, las partes del cuerpo no obtienen suficiente oxígeno que es absolutamente esencial para su funcionamiento.

Los glóbulos blancos combaten la infección atacando y destruyendo los gérmenes y su menor número en la anemia aplástica conduce a un mecanismo de defensa deficiente que hace que el individuo sufriente sea propenso a varias y en ocasiones letales infecciones.

Las plaquetas son células sanguíneas que controlan el sangrado al formar coágulos de sangre en áreas de lesiones. La reducción de las plaquetas conduce a un trastorno de la coagulación de la sangre, por el cual la sangre no se coagula de forma natural, lo que provoca un sangrado incontrolado.

Papel de la homeopatía en la anemia aplástica

01 Los medicamentos homeopáticos intentan estimular la porción saludable de la médula ósea para mejorar la producción celular. Esto puede ayudar a reducir la cantidad de transfusiones de sangre.

02 Los medicamentos homeopáticos mejoran la vitalidad general y el bienestar de un paciente para ayudarlo a combatir las infecciones.

03 Los medicamentos homeopáticos pueden ser útiles para controlar el trastorno hemorrágico asociado con la anemia aplástica.

04 Los medicamentos homeopáticos son efectivos para reducir el curso y el ritmo de la enfermedad.

05 El diagnóstico de anemia aplástica puede tener un impacto emocional terrible en el paciente, lo que puede tener un efecto perjudicial sobre la inmunidad, lo que agrega combustible al fuego. Los medicamentos homeopáticos que tienen una influencia positiva en la psique del paciente pueden ocuparse de este vínculo mente-cuerpo.

06 Los medicamentos homeopáticos son beneficiosos para contrarrestar los efectos secundarios asociados con la terapia convencional.

07 Los medicamentos homeopáticos tienen un efecto beneficioso o preventivo muy efectivo a largo plazo en términos de contrarrestar las tendencias genéticas y equilibrar la inmunidad alterada que son las causas de esta grave enfermedad. Las posibilidades de recaída disminuyen significativamente con el tratamiento de la homeopatía. El punto importante que debe enfatizarse es que cuando se trata de afecciones graves como la anemia aplástica, los efectos beneficiosos de los sistemas terapéuticos múltiples deben usarse en concordancia entre sí. No puede haber una línea de tratamiento única o exclusiva. Los medicamentos homeopáticos, ya que no interfieren negativamente con la medicación convencional, son absolutamente seguros.

Sin embargo, teniendo en cuenta el ritmo y la naturaleza grave de la enfermedad, la homeopatía sola puede tener limitaciones en el tratamiento de la anemia aplástica. No se puede esperar una cura milagrosa para la anemia aplástica con homeopatía sola. No obstante, el tratamiento de homeopatía junto con el tratamiento convencional puede agregar mucho al manejo de calidad del paciente con anemia aplástica. Cabe destacar que el tratamiento homeopático no es un sustituto de ningún modo de la medicina moderna, como la transfusión de sangre o el trasplante de médula ósea, etc. El papel de la homeopatía es más complementario que alternativo, cuando se trata de tratar la anemia aplástica.

En lenguaje sencillo…

La anemia aplástica (A = sin, plástico = células) es una afección en la que la médula ósea (que es una fuente principal para la producción de nuevas células sanguíneas) no produce suficientes células. El resultado es un recuento bajo de los tres tipos de células sanguíneas: los glóbulos rojos, los glóbulos blancos y las plaquetas.