No necesariamente. La nicotina es una de las 5 sustancias más adictivas en el mundo y, para muchas personas, es casi imposible dejarla.
Cuando los pacientes ingresaron en el hospital general para evaluar lo que casi con toda seguridad era cáncer de pulmón y temas relacionados con el tabaquismo, era muy probable que hubieran dejado de fumar durante un mes, 2 meses o 4 meses antes de la admisión. Ellos decían: “Sabía que algo andaba mal”. Horriblemente, unfijably mal. Cuando dijeron eso, sabía que el resultado sería malo, y siempre lo fue.
Los fumadores vinculan el cáncer de pulmón más estrechamente con su salud en declive que las personas que han tenido IM. Los ataques cardíacos suelen ser el resultado de múltiples factores, y si son adictos a la nicotina, pueden centrarse en otros problemas primero. Todavía sigue siendo un gran factor de riesgo para eventos cardíacos fatales.
