¿Por qué, si estamos en una emergencia o pánico, sentimos bocas sedientas y amargas?

Cuando entramos en pánico, nuestra adrenalina entra en acción cuando nos ponemos en modo de lucha o de vuelo. Durante esta fase, experimentamos varios efectos secundarios, la boca seca es solo uno de ellos. Desde el punto de vista fisiológico, los alumnos se comunican, nuestro ritmo cardíaco aumenta y nuestra circulación favorece que la mayor parte de nuestra sangre vaya a nuestra función cerebral. Todo esto es temporal, y cuando comenzamos a relajarnos, nuestro cuerpo vuelve a la normalidad. Durante un episodio de pánico o un episodio de ansiedad, nuestro ritmo cardíaco se acelera, y comenzamos a respirar por la boca para complementar el aumento del flujo sanguíneo. El aire hará que su saliva se seque temporalmente, creando así la sensación de sequedad en la boca.

Espero que responda la pregunta por ti!

La sensación de sequedad de la boca se conoce como “xerostomía” en la medicina. Es esta xerostomía la que te hace sentir sed y altera la forma en que tu lengua percibe la sensación del gusto.

Cuando se encuentra en una emergencia, o en algún tipo de estrés similar, su cuerpo produce sustancias químicas conocidas como cortisol (o en palabras más simples, esteroides). El cortisol ayuda a su cuerpo a prepararse para luchar contra la situación y controlar el estrés. Pero también reduce el funcionamiento de las glándulas salivales, lo que reduce la salivación. Esto produce una sensación de sequedad, que se registra en el cerebro como sed.

La sensación de sabor se lleva a cabo por órganos especializados conocidos como papilas gustativas presentes en la lengua. La saliva es necesaria para que funcionen correctamente. Cuando hay una reducción en la saliva, las sensaciones del gusto se alteran, lo que produce un sabor amargo.

Una vez que la situación ha terminado, los niveles de cortisol del cuerpo vuelven a la normalidad y se reanuda la producción de saliva, lo que le alivia de la sequedad oral.

Cuando estamos en estado de pánico, nuestro sistema nervioso cambia al modo “luchar o huir” (simpático) del modo “descansar y digerir” (parasimpático), y las funciones digestivas quedan temporalmente retenidas, y el corazón late más rápido, se acelera la sangre a las extremidades y lejos de los órganos digestivos para permitirle luchar … o huir del peligro. No sé sobre un sabor amargo, pero eso explicaría la sequedad, ya que el flujo de saliva se detendrá o disminuirá, ya que eso es parte de la digestión.