Está prescrito para hacer pranayama a una hora temprana de la mañana, una o dos horas antes del amanecer, cuando la sustancia de oxígeno es más notable en todas partes. Del mismo modo, el cuerpo de la madrugada es nuevo y la personalidad es clara por cualquier forma de pensar. Un estómago vacío es perfecto para pranayama. Temprano en la mañana, se procesa la alimentación gastada en el día anterior.
Se prescribe que debes aclarar tus entrañas antes de comenzar asanas o pranayama. En el caso de que no puedas hacer pranayama en la mañana, intenta hacerlo por la noche alrededor del atardecer. Puedes hornar pranayama en una habitación muy ventilada, impecable y despejada, con mucho espacio libre para el enredo de yoga y el desarrollo libre. No debería haber ninguna conmoción que pueda desviar tu cerebro.
Por otro lado, puedes afilar pranayama afuera en un vivero de patio o en un jardín dado que el clima no es ni excesivamente frío ni excesivamente caliente. Trate de no practicar afuera cuando sopla viento fuerte. Abstenerse de ensayar yoga bajo un ventilador o un sistema de ventilación, ya que podría afectar la temperatura corporal y causar escalofríos.