Estos consejos a veces me ayudan cuando estoy en una situación similar (y la siesta me resulta muy difícil, la mayoría de las veces):
- Toma una ducha rápida y caliente. Cuando tu cuerpo se enfría después, imita la caída natural en la temperatura corporal que atraviesa tu cuerpo mientras se prepara para dormir. Esto puede ayudarlo a sentirse más somnoliento.
- Mantenga su habitación lo más oscura y fresca posible.
- ¡NO hay televisión, teléfonos, iPads ni lugares similares cerca de usted!
- Tómese 5 minutos para permanecer quieto en la cama, con los ojos cerrados y concéntrese en su respiración. Intentas relajarte lo más posible lo más rápido posible. Así que haz tu mejor esfuerzo para vaciar tu mente de todos los demás pensamientos intrusivos y simplemente concéntrate en “inhalar” … “exhalando”. Esto puede requerir algo de práctica, pero una vez dominado, lo encuentro muy efectivo.
- Intenta no obsesionarte tanto por quedarte dormido que te “desquites”. En lugar de eso, sigue diciéndote que incluso si no logras quedarte dormido, al menos tienes un par de horas donde puedes acostarte tranquilamente y descansar.
- Rutina. Siga la misma rutina CADA vez antes de ir a dormir (por ejemplo, coma algo, dúchese, medite), no solo antes de intentar dormir la siesta.
Espero que esto ayude. ¡Las siestas energéticas pueden hacer una gran diferencia!