Haciendo a la gente asocial.
Antes de que aparecieran los teléfonos inteligentes, la gente estaba pasando el rato con sus amigos y hablando con ellos.
La gente tenía que hablar porque necesitaban información o indicaciones para ir a la farmacia. La gente sentía curiosidad por algo y se lo preguntaba directamente a una persona, como el motor que tiene su automóvil bajo este capó.
Ahora tiene una computadora en su bolsillo y puede encontrar casi todas las respuestas a sus preguntas o problemas de la vida diaria.
Literalmente perdí a algunos de mis amigos con la tecnología y como ingeniero informático esta es la única razón por la que no quiero más tecnología que vida social.