¿Los neurotransmisores afectan nuestra salud dental / oral?

LA ASOCIACIÓN AMERICANA DE DIABETES estima que 23.1 millones de estadounidenses han sido diagnosticados con diabetes (ya sea tipo 1, tipo 2 o gestacional). Al menos otros 7 millones permanecen sin diagnosticar, y eso no incluye a los millones adicionales que se consideran pre-diabéticos. Pero, ¿qué tiene que ver la diabetes con la salud oral? Lamentablemente, bastante.

Diabetes y enfermedad de las encías

La diabetes es una enfermedad crónica que, o bien significa que el páncreas no produce insulina (tipo 1) o que el cuerpo no la usa de manera efectiva (tipo 2 y gestacional), los cuales provocan una elevación de la glucosa en la sangre . El impacto más grave que la glucosa en sangre tiene sobre la salud oral es que simultáneamente debilita el sistema inmunológico y proporciona más alimento a las bacterias que atacan los dientes y las encías.

Este ataque doble es la razón por la cual el 22% de los diabéticos también tienen enfermedad de las encías, ya sea en las primeras etapas de la inflamación (gingivitis) o en las etapas avanzadas (periodontitis) que amenazan los dientes, las encías y el hueso de soporte. La bacteria que causa la enfermedad de las encías también puede viajar a través del torrente sanguíneo y hacer que sea aún más difícil regular el azúcar en la sangre.

Además de aumentar el riesgo de gingivitis y periodontitis, la diabetes no controlada también puede conducir a una variedad de otros problemas de salud oral, como:

  • Boca seca
  • Síndrome de boca ardiente
  • Cicatrización deteriorada o más lenta
  • Mayor gravedad y frecuencia de infecciones
  • Infecciones fúngicas
  • Aumento de la glándula salival

Lo que puedes hacer

Ahora las buenas noticias: incluso con diabetes, una buena salud oral está al alcance . Aún mejor: ¡mantener tus dientes y encías saludables también hará que la diabetes sea más fácil de manejar! Asegúrese de cepillarse dos veces al día durante dos minutos con un cepillo de cerdas suaves y pasta de dientes con flúor, use hilo dental a diario o use un limpiador con agua o un cepillo interdental, use un enjuague bucal sin alcohol y no fume. La regulación cuidadosa de su ingesta de azúcar es un factor importante también.

El papel del dentista

Si le han diagnosticado diabetes, los dos exámenes dentales estándar por año pueden no ser suficientes. Para mantener el lado seguro, le recomendamos que aumente el número de visitas anuales a tres o cuatro. También es crucial para nosotros saber cómo usted y su médico trabajan juntos para controlarlo. Del mismo modo, su médico necesita saber cómo trabajamos con usted para mantener sus dientes y encías saludables.

¡Podemos ayudarlo a ganar la batalla por su salud dental!