Muchos de los beneficios de beber una copa de vino provienen de un poderoso antioxidante llamado resveratrol, que también se encuentra en las uvas, nueces, bayas y otras plantas.
El resveratrol se puede tomar en forma de suplemento para obtener una dosis mucho más efectiva y sin tener que beber vino. Al elegir un suplemento, asegúrese de que esté probado en laboratorio para determinar su pureza y no contenga Emodin, la causa principal de los efectos secundarios informados por el uso de resveratrol.
