Los “ejercicios faciales” probablemente sean inútiles en un intento de remodelar la cara.
La forma de la cara está determinada principalmente por la genética, la edad y, en cierta medida, por el peso corporal y otros factores del estilo de vida.
Por lo tanto, si está decidido a hacer un ejercicio para modificar la forma de su rostro, le recomendaría que evalúe su estado general de salud, en primer lugar y bajo la supervisión de su médico: ¿tiene sobrepeso? ¿Fumas? ¿Bebe alcohol en forma exagerada? ¿Tienes hábitos de sueño saludables? ¿Come alimentos procesados?
Si tiene sobrepeso y desea una cara más delgada, tenga en cuenta que la cara no siempre se verá notablemente más delgada, incluso si pierde una gran cantidad de peso corporal. Además, un mito pernicioso es que el ejercicio localizado conduce a la pérdida de grasa localizada. Así no es como funciona el metabolismo de las grasas.
Si era muy pesado y quería una cara más delgada, entonces hacer ejercicios de cuerpo completo utilizando los grupos musculares más grandes, junto con un plan nutricional adecuado, podría conducir a la pérdida de peso y potencialmente alterar la forma de su rostro.
En última instancia, considere si la forma de su cara es realmente tan importante como podría pensar.
¡Buena suerte!
