Ocasionalmente las personas tienen eventos adversos a la vacunación. Estos tienden a ser transitorios, pero pueden hacer que la gente se sienta bastante mal (comparable a una enfermedad similar a la gripe). Muy rara vez las personas tienen una reacción alérgica a la vacuna o a uno de sus componentes, que puede ser fatal (pero generalmente no es así cuando reciben tratamiento médico de inmediato). Algunas vacunas tienen problemas específicos, como la vacuna oral contra la polio, que ocasionalmente podría causar polio (muy raro). Además de tener dolor en el sitio de la inyección o fiebre leve y síntomas de resfriado, los efectos adversos de las vacunas comunes son extremadamente raros.
Eso está en el lado del “riesgo” de las cosas.
Del lado del “beneficio” de las cosas, tenemos que las vacunas han sido la intervención de salud pública más efectiva: decenas de millones de personas no han muerto porque las vacunas previenen la enfermedad y las vacunas son bastante baratas por lo que son. Además, algunas infecciones infantiles, cuando no son mortales, causan discapacidades (como parálisis por polio) u otros efectos duraderos (cicatrices faciales por viruela). Ellos son una invención increíble.
