La asistencia sanitaria no es solo una cuestión de financiación, sino que también requiere una infraestructura educativa seria. Capacitar a médicos y enfermeras no es fácil y requiere tiempo. Además, equipar a los hospitales con tecnología moderna avanzada es inútil si no cuenta con personal capacitado para manejarlo.
Una simple pregunta como el derecho a la atención médica revela muy rápidamente cuánto capital social acumulado es necesario para que cualquier sistema moderno funcione de manera efectiva.