Hay un dicho que dice: “Muere de hambre, alimenta la fiebre”. ¿O es “Alimente un resfriado, muera de hambre”? No importa, de cualquier forma que lo mires, necesitas nutrición e hidratación. Puede que no tengas hambre o sed, pero de todos modos debes absorberlo.
Si su cuerpo está arrojando fluidos a través de su nariz y cortando flema a través de sus pulmones, necesita reemplazar esos fluidos y mantener el revestimiento de las membranas mucosas para que puedan hacer lo que se supone que deben hacer: sacar cosas malas de su cuerpo.
Así que déjenme unirme a otros aquí con un rotundo “¡Oh, no! ¡No está bien!”