El cerebro es un órgano físico y tiene una capacidad finita para la memoria.
Pero no convertiría a las personas inmortales en “zombis tontos”. Tu cerebro no se llena y luego, de repente, dejas de aprender o recordar cosas nuevas. Debido a que la memoria se almacena holográficamente en el cerebro, los recuerdos más antiguos se volverían más confusos y difusos, ya que los recuerdos más recientes los sobreescribían.
No es tan simple, por supuesto; recuerdos que tienen una fuerte resonancia, por ejemplo, que tienen un fuerte componente emocional, se mantendrían. Pero irían a la deriva con el tiempo. Cada vez que accedes a un recuerdo, lo estás reescribiendo, y es por eso que algunos de tus recuerdos más antiguos pueden parecer bastante vívidos pero inexactos (alguna vez tuviste la experiencia de mirar una fotografía de algo que recuerdas vívidamente desde hace mucho tiempo, y notando que los detalles en su memoria están equivocados? Es por eso).
Pero no solo dejas de formar nuevos recuerdos cuando tu cerebro se “llena”.
