¿Cómo sería la vida si nunca nos sintiéramos somnolientos y nunca tuviéramos que dormir?
Sin sueños, sin pesadillas, sin ronquidos, sin círculos oscuros. No habrá mensajes cursis de buenas noches, dulces sueños. Los despertadores nunca habrían existido. Sin la comodidad del sueño, las clases serán más aburridas y largas de lo que…