¿Es culpa nuestra o nuestro cuerpo carece de nutrientes si nuestra piel se ve afectada por el calor constante del sol y comienza a broncearse?

Es absolutamente normal.
La luz solar aumenta la actividad de la melanina, una proteína responsable del tono de la piel. Por lo tanto, cuanto más se expone a la luz solar, más oscuro es el tono de su piel.